EL TESORO DE BERENGUER Y EL CRIMEN DE KURT WALDHEIM

RENNES LE CHATEAU Y PRIORATO DE SION cadurifitudigo

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RENNES LE CHATEAU Y PRIORATO DE SION

      En este artículo se habla de un cura francés que descubrió en el siglo XIX un tesoro gallego (de la Gallaecia hispano-portuguesa del siglo V) que llevaba catorce siglos oculto en una cueva del sur de Francia, porque en el siglo V el rey godo Teodorico de Toulouse se lo robó a Rekiario el rey Suevo de Galicia-Portugal después de vencerlo en una batalla traicionera y ejecutarlo de manera infame, y se llevó el tesoro a Francia, y un sucesor de Teodorico se enterró con dicho tesoro, que permaneció oculto catorce siglos en la cueva que sirvió de sepultura hasta que en el siglo XIX Berenguer Sauniere el cura de Rennes le Chateau, pueblecito al sur de la ciudad de Carcasona, al norte de nuestros Pirineos orientales, lo descubrió en 1.899. El tesoro, como es de suponer, hoy tendría valor artístico y como reliquia y para dar legitimidad monárquica a alguna cabeza sin corona, y constaría de coronas de oro, perlas , piedras preciosas, cálices de oro, brazaletes de oro, platos de oro, monedas de oro y plata, etc. Todo digno de un museo histórico-arqueológico de hoy en día.

      Pero lo que relaciona a este curita francés con el Código da Vinci es que también encontró unas genealogías muy controvertidas en la tumba de la aristócrata María de Negre de Arlés, marquesa de Hautpoul de Blanchefort, Dama y Señora de la región de Rennes le Chateau, que es donde estaban ubicados la cueva y su tesoro, bajo la jurisdicción de Carcasona. Dichas genealogías no han sido dadas a conocer al público en general todavía, por culpa del atentado a las torres gemelas del 11-S en Nueva York, aunque algún día saldrán a la luz; lo que sí ha trascendido de ellas es que dicha Dama sería de un linaje descendiente de los merovingios, los cuales a su vez tendrían una posible ascendencia en un vástago de María Magdalena y un descendiente del rey David de Judá. Hay quien dice que ésto les daría derecho a reinar en Francia, y posiblemente fue lo que persiguió el Priorato en 1643 en tiempos de Luis XIV, primer hijo de Mazarino y Ana de Austria, la reina española de Francia, pero lo que primeramente ha buscado el Priorato de Sión a lo largo de su historia hasta la época del cura Berenguer ha sido conjuntar el hallazgo del tesoro franco-gallego con el hallazgo del descendiente de los merovingios para que de su unión naciera algo positivo para sus reivindicaciones judío-cristianas en Tierra Santa. Desgraciadamente el cura Berenguer Sauniere no cumplió dicha aspiración y vendió el tesoro al emperador Francisco José de Habsburgo, que aparte de usurpar algo que no le pertenecía, aunque pagó mucho dinero por ello, pagó aún más con las dos maldiciones que sufrió, estilo de las de la tumba de Tutankamón: se suicidó su hijo único Rodolfo con su amante en el pabellón de caza de Mayerling y 10 años más tarde perdió a su esposa la emperatriz Sissí de Baviera, a la que un anarquista asesinó clavándole un punzón en el pecho. La tercera muerte, en Sarajevo, la de su heredero el archiduque Francisco Fernando, que no era hijo suyo, le sirvió de excusa para desatar la 1ª guerra mundial, que provocó él, ya que se sentía legitimado por el tesoro que poseía y que tantos sufrimientos le había costado obtener,  ¿y no era él su poseedor legítimo, puesto que lo había comprado con dinero contante y sonante? ¿por qué le daba derecho a aspirar a una hegemonía mundial? ¿por las genealogías? Murió en mitad del conflicto en 1.916, sin ver su derrota y sin contárnoslo.

      El priorato de Sión se eclipso algunos años desde el negocio de Berenguer hasta que hubo una difusión de las genealogías, tal vez con alguna falsificación, en el año 1.956 y que fueron a parar a manos de gente importante y de alto rango que habían trabajado de cerca con Churchill y De Gaulle durante la 2ª guerra mundial y que en ese año de 1.956 resucitaron un Priorato de Sión que, falto del incentivo del tesoro, no obstante reconocía la legitimidad de los derechos de los merovingios pero sin saber muy bien con qué fin. Es este Priorato de Sión real del siglo XX el que estimula a Dan Brown para crear el libro: el Código Da Vinci.

EL CURA BERENGUER SAUNIÉRE, EL TESORO DE RENNES LE CHATEAU Y EL PRIORATO DE SIÓN

En 1885, a los 33 años de edad, Berenguer Sauniére fue nombrado párroco de Rennes le Chateau (Rennes el Castillo), al sureste de Francia y al norte de los Pirineos catalanes. Se acercaban votaciones francesas sobre si se deseaba Monarquía o República y lo primero que hizo Berenguer fue pronunciar un sermón a los feligreses inclinándoles el voto hacia la Monarquía. Como lo que salió elegido fue la República le llegó un correctivo que le hizo abandonar temporalmente su sede de Rennes el Castillo por un seminario en Narbona, pero aquí conoció a la condesa de Chambord, sobrina del emperador Francisco José de Austria, la cual le dio algo de dinero e influyó para que le repusieran en su sede, donde decía la leyenda que había oculto un fabuloso tesoro.

Pilar visigótico de piedra del altar donde se encontró el primer y pequeño criptograma

     

 El techo de la iglesia de Berenguer tenía goteras y el altar estaba muy estropeado, así que hubo que cambiar el altar. Al retirar la lápida del altar quedó al descubierto la parte superior del pilar visigótico que lo sostenía, en el que había un pequeño hoyo que contenía unos helechos y un pergamino enrollado, éste resultó llevar escrito un pasaje de los evangelios y cuando Berenguer se lo enseñó a Boudet, su colega de Rennes les Bains (Rennes los Baños) que era el pueblo de al lado, éste le introdujo en el priorato de Sión y le proporcionó el significado secreto del pasaje evangélico que una vez decodificado decía así:

“A DAGOBERTO REY Y A SIÓN PERTENECE ESTE TESORO, Y ÉL ESTÁ AHÍ MUERTO”

Así pues existía un tesoro y le pertenecía al rey franco merovingio Dagoberto II o a sus herederos y a Sión, una colina santa de Jerusalén y una orden de caballería medieval europea que hizo las cruzadas para recuperar Tierra Santa. Pero ¿quién era Dagoberto II?

  El padre de Dagoberto II, el rey Sigeberto III de Austrasia (antigua Francia) sólo tenía este hijo, que apenas contaba con 2 años de edad cuando el padre Sigeberto III murió. Inmediatamente Grimoaldo, chambelán de palacio aseguró que el difunto Sigeberto había adoptado a su hijo (de Grimoaldo) llamado Childeberto y lo había declarado su heredero. A fin de completar su plan, Grimoaldo hizo que Didón obispo de Poitiers tonsurara al hijo legítimo y arregló las cosas para que se le llevara secretamente a Irlanda, al monasterio de Slane, donde se crió (Grimoaldo no se atrevió a matarlo). Una vez concluido el asunto Grimoaldo hizo todos los esfuerzos para que reinara su hijo Childeberto, pero los nobles de Austrasia se le enfrentaron, lo apresaron y lo ajusticiaron. Durante algunos años el reino de Austrasia vivió en la incertidumbre hasta que Dagoberto II regresó de Irlanda, hecho ya un mozo, y se instaló como rey en el año 674. El joven monarca sólo reinó 4 años antes de ser asesinado de un lanzazo en el cráneo mientras descansaba bajo un árbol por un tal Pepino de Heristall en el año 678. La esposa de Dagoberto, Mechtilda, una fornida joven anglosajona había muerto al dar a luz a su tercera hija, por lo que Dagoberto se había casado en segundas nupcias con Giselle del Razés, hija del conde del Razés, de la cual tuvo un hijo, Sigeberto IV del que se dice que fue rescatado de morir asesinado igual que su padre y se refugió en el Razés, cuya capital era Rennes le Chateau, donde su descendencia se habría mantenido viva y dueña del lugar hasta la revolución francesa.

      En cuanto a Sión, es la colina de Jerusalén que eligió el rey David de Judá para residir en ella y reposar, y de ahí viene el sionismo, que fue el movimiento de los judíos del siglo pasado que perseguía retornar a un hogar en Tierra Santa pero no por motivos religiosos y para establecer culto, sino para encontrar un lugar donde habitar y reposar, como si cada individuo judío fuera un rey David en si mismo.

      Hasta aquí la historia de san Dagoberto y de Sión, pero ¿y su tumba? Según el criptomensaje debía estar ahí cerca del pilar visigótico y del altar, pero ¿era cosa de ponerse a buscar?

Tal vez en ella se hallaba el tesoro. Lo cierto es que Berenguer no se decidió todavía y decidió esperar a encontrar más pruebas, más indicios, más señales. Y eso le llegó.

Pilar de madera del púlpito de la iglesia donde se encontró el segundo criptograma

      
      AÑO 1891:

      Continuando con las obras de restauración le llegó el turno al pilar de madera sobre el que se sostenía el púlpito y que databa del siglo XVII, Berenguer lo desencajó de su sitio y entonces sonó un chasquido como si se rompiera una ampolla de vidrio que había estado oculta en el hueco del pilar. Y efectivamente se trataba de un segundo pasaje de los evangelios codificado como en el caso anterior, pero esta vez de manera mucho más complicada. Al decodificarlo el mensaje decía:

PASTORA, NADA DE TENTACIÓN, QUE POUSSIN Y TENIERS GUARDAN LA CLAVE

PAZ 681

POR LA CRUZ Y ESTE CABALLO DE DIOS YO ACABO CON ESTE DEMONIO DE GUARDIÁN

A MEDIODÍA MANZANAS AZULES.

Berenguer ahora ya sí que no pudo contenerse de investigar si había tumba o no, y procedió a excavar al pie y al frente del altar, donde se decía que estaba la cripta de los señores de Rennes le Chateau. Lo primero que encontró fue que la losa que servía de tapadera estaba del revés, boca abajo, y que en su cara inferior había esculpida la imagen de dos caballeros, uno de ellos sosteniendo un niño en brazos, que sería Sigeberto el hijo de San Dagoberto siendo rescatado por un ayo y trasladado al Razés precisamente en el año 680 y para la posteridad.

La losa de los caballeros que estaba boca abajo delante del altar

Excavando debajo de la losa, Berenguer encontró cuatro esqueletos y una olla no muy grande que contenía alhajas y monedas antiguas de oro y plata, de unos cien años de antigüedad. Naturalmente no era el enorme tesoro que se suponía encontraría, pero algo es algo para empezar.

      AÑO 1892:

      Este año apareció el tercer y último criptomensaje, esta vez en el pilar de la pila del agua bendita. Fue el que menos sorpresa causó y sin embargo acabará siendo el más importante para la búsqueda del tesoro. Una vez descodificado decía:

      PASTOR, NO TIENTES LA REINA DE LA CRESTA SIN LA SAL Y LA CRUZ

      EL DEMONIO DEL BAILE TENSA EL ARCO.

      No había más pilares con mensajes en la iglesia     . De momento lo único que podía ayudar a entender el asunto era la frase del segundo criptomensaje, que decía: QUE POUSSIN Y TENIERS GUARDAN LA CLAVE.           Poussin y Teniers eran dos pintores del siglo XVII, probablemente los que compusieron el criptomensaje, y fue el Priorato de Sión local de su vecino el abate Boudet, cuyos miembros estaban interesados en Rennes le Chateau, el que indicó a Berenguer cuales de los cuadros de dichos autores eran los que guardaban la clave y debía comprar en París.

      AÑO 1893:

      Berenguer visita París con todos los gastos pagados en un viaje que le lleva a conocer al abad de San Sulpicio (iglesia sede del Priorato de Sión en París) y a otros personajes del mundo del ocultismo, así como a la cantante Emma Calvé que resultó ser una paisana del Razés que en su infancia había sido pastora. Ahora era famosa, tanto que venía de cantar ante la reina Victoria de Inglaterra. Con este encuentro Berenguer ya pudo interpretar la frase del segundo criptomensaje que decía: PASTORA, NADA DE TENTACIÓN QUE POUSSIN Y TENIERS GUARDAN LA CLAVE. Evidentemente la pastora tentadora era Emma, y Berenguer debía cuidarse mucho de su tentación y centrarse en descifrar los cuadros de Poussin y Teniers, cuya adquisición en el Museo del Louvre era el asunto que le había llevado a París. Los cuadros en concreto eran: La Tentación de San Antonio, de Teniers, y Los pastores de la Arcadia, de Poussin. El primero no era más que la figura de San Antonio ermitaño en una cueva, cuya interpretación no requería gran esfuerzo, se trataba simplemente de dedicarse al estudio como un ermitaño venciendo todas las tentaciones que pudieran surgir en el camino. El segundo cuadro era más duro de pelar. Tres pastores y una pastora en torno a un túmulo funerario.

Pero la perseverancia dio su fruto.

Cuadro de Poussin: Los pastores de la Arcadia, o también: Et in Arcadia Ego

Túmulo cerca de Rennes le Chateau en el que se basó Poussin para su cuadro

      AÑO 1894:

      Berenguer, en una de sus salidas por los alrededores de Rennes el Castillo, descubre el túmulo funerario que sirvió de modelo al pintor Poussin en el siglo XVII. Está en el camino de Arques, a unos 20 o 30 kilómetros de Rennes. Por tanto todo es real, el tesoro existe y la pintura lo que hace es señalar su ubicación en la cresta montañosa que se ve al fondo del cuadro y que precisamente es el sistema montañoso sobre el que se asienta Rennes. No hay que ir muy lejos para buscar. Eso es bueno.

Un buen día, Berenguer está explorando los alrededores de Rennes y decide trepar hasta la aguda cresta de un pico. A mitad de camino se vuelve y no puede creer lo que ven sus ojos. Frente a él, al otro lado del barranco cinco rocas redondas se mantienen en equilibrio sobre una escarpadura. La estampa de estas rocas redondas tiene algo de insólito. Es mucha casualidad que el paso de los siglos las haya redondeado hasta darles aquella forma de esfera casi perfecta. Pero lo más insólito es que aquellas piedras, a la luz del mediodía, lucen como gigantescas manzanas azules. Ya está, ha encontrado la clave de la frase del segundo criptomensaje que decía A MEDIODÍA MANZANAS AZULES, se trata de la ubicación geográfica del tesoro. Impaciente Berenguer desciende la escarpada ladera para acercarse a las redondas piedras del otro lado del barranco pero, conforme va bajando se producen dos fenómenos; por un lado el suave color azulado de las piedras se difumina para dar paso a un gris apagado, por otro lado su forma esférica, vistas las piedras desde arriba, se pierde también para dar paso a una forma más bien cúbica. Sin embargo Berenguer termina por descubrir una angosta grieta que abre acceso a una sima profunda. Para explorarla necesitará tiempo y, sobre todo, no ser molestado. Urde junto con Maria Denardaud, su asistenta, una treta. Anuncian en el pueblo que van al campo a por piedras para construir una gruta para embellecer el jardín, y mientras Maria se queda recogiendo las piedras en una cesta y seleccionándolas, Berenguer se introduce en el interior de la cueva y a veces el paso es tan angosto que debe desmenuzar la tierra con las manos para que su cuerpo pueda seguir descendiendo. Extenuados, cada día regresan a casa procurando que nadie les vea. Al fin, un día Berenguer alcanza el piso de la caverna y allí descubre un túnel excavado por la mano del hombre que da acceso a otras cavidad más profunda, donde encuentra dos esqueletos y a su alrededor fragmentos de vestiduras; ambos esqueletos en la inmovilidad de la muerte parecen guardar lo que es el acceso a otra cueva, allí son veinte los esqueletos que cuenta, sin duda soldados visigodos, a juzgar por sus harapos carcomidos y por las armas que hay entre ellos. No hay tesoro, pero el hallazgo es de un gran valor arqueológico que consuela un poco, aunque no mucho, a un erudito como Berenguer.

      ¿Dónde dar el siguiente paso? De oca a oca y tiro porque me toca. Puesto que lo que han hallado es una tumba, tal vez la solución se encuentre en otra tumba, la de la antigua señora del lugar Maria de Negre d’Arles d’Hautpoul de Blanchefort. Esta vez Berenguer tiene más suerte.

      AÑO 1895:

      Esta vez se trata de profanar una tumba sin permiso del pueblo, pero el cementerio está cerca de la iglesia de Berenguer y ahí acude cada noche tomando prestados pico y pala, que ni siquiera le pertenecen, y haciendo un mejunje de excavaciones de tumbas para crear un osario común, cosa que ya había avisado a los del pueblo que haría, y aprovechando para profanar la tumba de Maria de Negre, muerta en 1781, donde encuentra unos importantes documentos: dos genealogías y un testamento que pertenecían a la difunta. Sin duda son los documentos a que se refería el párroco de Rennes el Castillo del siglo XIX cuando dijo: “Bajo el altar de la iglesia de Rennes le Chateau existe una cámara en la que se encuentran las tumbas de los tiempos de los antiguos reyes y ciertos documentos que no deben ser del dominio público. Con este propósito yo mismo me he encargado de que se selle el acceso a dicha cripta” Luego su sobrino y párroco sucesor, el confesor de Maria de Negre recibió de ésta el secreto y la petición de que lo salvaguardara, por lo que él volvió a abrir la cripta, depositó en ella la olla con las monedas y alhajas que le habían dejado en depósito las familias del pueblo que temían los desmanes de los revolucionarios franceses, tomó los documentos y los depositó en la tumba de su dueña, que es donde los encuentra Berenguer. Esta vez tiene algo de auténtico valor, ya que los documentos revelan algo sensacional, y con ellos va Berenguer al miembro más poderoso del Priorato de Sión, el archiduque Johann Salvador von Habsburgo, que los remite a su pariente el emperador Francisco José, el cual los da por válidos y empieza a fluir el dinero hacia Berenguer y, sin que éste lo sepa, al párroco vecino de Rennes los Baños y, sin que ninguno de los dos lo sepa, hacia el obispo de Carcasona, superior de ambos, pues todos están metidos en el ajo con el emperador de Austria.

      Con el dinero Berenguer ya puede arreglar su iglesia al completo, incluido el tejado. Dos años dura la reparación, de 1895 a 1897, pero a los dos años Francisco José vuelve a estar impaciente, algo se ha encontrado pero no se ha encontrado el tesoro, que es lo que importa. Así que la búsqueda debe reanudarse. Pero antes debe solventarse una dificultad que ha surgido en el camino: el abate Gelis.

      AÑO 1897:

      El abate Gelis es el párroco de Coustaussa, un pueblo cercano a Rennes. Es un hombre de una honradez a prueba de bomba y por eso ha sido elegido por el cura de Rennes le Chateau y el cura de Rennes los Baños como depositario de los criptomensajes, alguien debería guardarlos, alguien neutral, y él cumple los requisitos.

      1 de noviembre de 1897:

      Estamos en la mansión del abate Gelis. Éste se encuentra sentado en un butacón discutiendo con el archiduque Johann Salvador de Habsburgo que está sentado en otro butacón enfrente, ambos junto a la chimenea. El tema de la discusión está en que Gelis, que ha tenido conocimiento del contenido de las genealogías y el testamento hallados en la tumba de Maria de Negre, opina que de encontrarse el tesoro debía ser para un descendiente de la familia de dicha señora, pues todo apunta a que ella misma sería la descendiente de personajes sagrados de los tiempos bíblicos, y que su familia siempre ha sido la señora del lugar donde se encuentra el tesoro. Johann en cambio opina que no, opina que la operación la está financiando su pariente el emperador Francisco José de Austria Hungría y que por tanto el tesoro debe ser para la familia Habsburgo. Ambos, Gelis y Johann pertenecen al Priorato de Sión, pero naturalmente Johann tiene más rango social que Gelis y no entiende que este sea tan terco y tarde tanto en subordinársele. En un momento de la discusión Gelis llega a amenazar con hacer públicos los criptomensajes para que todo el mundo se entere y el asunto llegue ha ser del dominio público y lo dirima la opinión pública. Johann ya no puede aguantarse más. En ese momento entra la sirvienta de Gelis para despedirse porque ha terminado su jornada y se va a su casa, pero Johann está sentado de espaldas a ella y no sabe identificar quien es el que está conferenciando con su tío Gelis, por tanto no habrá testigos. Una vez que se ha ido, Johann desvía el tema de la conversación hacia asuntos más triviales, luego se levanta, se acerca a la chimenea, coge el atizador, se desliza suavemente detrás de Gelis y descarga con furia el atizador sobre su cráneo, una y otra vez hasta que se le cansa el brazo, lo contempla ahí en el suelo, quiere ver si está muerto, pero Gelis sigue con vida y se arrastra penosamente en dirección a la ventana, evidentemente quiere llegar a ella para pedir socorro, pero Johann se lo impide, ésta vez coge el hacha que está colgada en la pared y cuando Gelis está a punto de llegar a la ventana le descarga un hachazo mortal otra vez en el cráneo. El piso y las paredes están salpicados de sangre. Con cuidado y sin dejar una huella de pisada Johann arrastra el cuerpo de Gelis al centro de la habitación, le cruza los brazos sobre el pecho y le flexiona una pierna hacia el centro, dando a su crimen un oscuro significado esotérico. Luego entra a la otra habitación, se apodera de los criptomensajes y se va. Naturalmente un homicidio como éste, en el que el homicida no ha tocado el dinero de Gelis, era aparentemente extraño y además tiene un toque esotérico, hubiera llevado fácilmente tras la pista de Johann Salvador como autor del mismo, si no fuera porque su familia rápidamente inventó la noticia de que a Johann se le había dado por desaparecido en un viaje en barco por Sudamérica en una fecha anterior a la del homicidio de Gelis. Y cuando insistieron en que se le había vuelto a ver vivo por el Razés, entonces le dieron por muerto, y así ha quedado su biografía hasta hoy en día.

      
       AÑOS 1898-1899:

       Berenguer reanuda su búsqueda del tesoro centrándose en el tercer criptomensaje, el del pilar de la pila bautismal, el que le dará la victoria final: PASTOR NO TIENTES LA REINA DE LA CRESTA SIN LA SAL Y LA CRUZ, EL DEMONIO DEL BAILE TENSA EL ARCO, y gracias a su perseverancia y a su suerte acaba encontrando el tesoro, pero no acaba con el demonio de guardián, como decía el segundo criptomensaje, pues el tesoro va a parar íntegro, maleta tras maleta, a manos de Francisco José, que atiborra de dinero a Berenguer con cuatro duros, pues el aldeano cura se conforma con poder dar espléndidos banquetes cada tanto tiempo, con invitados como Emma Calvé y un ministro de la república francesa, para lo cual construye expresamente una villa lujosa, se dedica a coleccionar cosas raras y carísimas, a hacer grandes construcciones en y en torno a su iglesia, y cómo no, construye una estatua al demonio que coloca bajo la pila bautismal y que sirve de atracción turística hasta el día de hoy. No supo hacer justicia y se doblegó ante la violencia ejercida por Johann Salvador en nombre de los Habsburgo. Con su crucifijo en el pecho y montado en burro (el CABALLO DE DIOS que decía el segundo criptomensaje, la montura que sirvió al Dios cristiano hecho carne, es decir Jesucristo, para entrar en Jerusalén el domingo de Ramos) fue y vino de la cueva del tesoro una y cien veces para expoliarlo.

     

      AÑO 1917:

      Estamos en plena Primera Guerra Mundial, que ha desatado hace tres años el emperador Francisco José de Austria Hungría, muerto hace un año en el 1916, y que se ha propagado a numerosas naciones, entre ellas las de Oriente Medio. Inglaterra aprovecha para conquistar Tierra Santa tras 400 años de dominación turca, y el general Allenby descabalga de su caballo para entrar a pie en Jerusalén, prometiendo respetar todas las religiones que se practiquen en dicha ciudad y dando comienzo al mandato británico que en 1948 se convertirá en Estado Judío hasta el día de hoy. ¿Cómo hubiera sido la historia si Berenguer Sauniére hubiera ofrecido el tesoro al descendiente de Maria de Negre de Arles de Hautpoul de Blanchefort? Inmediatamente el descendiente habría despertado el interés de la alta aristocracia francesa de aquel tiempo, hubiera podido adquirir un título nobiliario, no ya el de conde del Razés sino simplemente el de Barón de Rennes le Chateau, por poner un ejemplo, y hubiera acudido a fiestas de la nobleza, entre otras las ofrecidas por el rey de Inglaterra, quien hubiera mostrado interés por el descendiente y por su linaje, lo hubiera enrolado en el ejército inglés, como ha hecho Gran Bretaña con tantos personajes de la realeza no ingleses, y lo hubiera dejado entrar en Jerusalén al frente de sus fuerzas y por delante del general Allenby. ¿Parece esto demasiado imaginar? Hay que tener presente lo que hicieron los ingleses en 1944 con De Gaulle y Leclerc en la Segunda Guerra Mundial. Los que llevaron el peso de las batallas fueron el norteamericano Eisenhower y el inglés Montgomery, fueron ellos los que liberaron África y desembarcaron en Normandía antes de liberar París, sin embargo tuvieron la deferencia y el detalle de eclipsarse y dejar que los franceses Leclerc y De Gaulle fueran los primeros en entrar simbólicamente con sus tanques en París, pese a que sin los anglonorteamericanos la liberación hubiera sido de todo punto imposible, los franceses por sí solos jamás hubieran hecho nada. Y volviendo al hilo, el descendiente francés incorporado a Tierra Santa hubiera hecho que el conflicto árabe-israelí fuera más suave de lo que es hoy en día, pues los franceses siempre han sido muy admirados y respetados por los árabes. Pero nada de esto pasó. Berenguer ignoró al descendiente legítimo y se dedicó a darse la gran vida con las rentas del tesoro, pero éstas terminaron en 1916 con la muerte de Francisco José, por eso cuando llegó el año de 1917, que era cuando hubiera culminado su obra en Jerusalén en el sentido hipotético que hemos mencionado pero que no culminó, ya no tenía nada que hacer entre los vivos y por eso murió, le dio una apoplejía a la entrada de su Torre Magdala, fue llevado a su lecho y días después murió. Nótese que en el mismo momento de morir manchó sus calzoncillos, y es porque reconoció que le esperaba una prueba dura en el más allá, tal vez tan dura como la que tuvo el abate Gelis en el más acá. El asunto Sauniére fue en suma un asunto importante, hasta tal punto que incluso la Virgen de Fátima, que se apareció ese mismo año de 1917, dedicó una tercera parte de su mensaje a despotricar contra los eclesiásticos apóstatas que abandonan sus deberes para con su rebaño, que descuidan el pastoreo espiritual de su grey para darse a la vida mundana y a los placeres y que se desvían de su misión sagrada. Es para meditarlo.

      AÑO 1955:

      Tres caballeros ingleses pertenecientes a la Liga Internacional de Libreros Anticuarios, uno de ellos amigo íntimo y personal de Winston Churchill y que había intervenido en la planificación logística de la invasión de Normandía, otro de ellos perteneciente a las artes gráficas y dedicado a producir biblias, y el otro, perteneciente al mundo de la banca y a la vez agente secreto, estos tres caballeros británicos, como venía diciendo, pidieron permiso al consulado general de Francia para, según sus propias palabras “exportar fuera de ese país (de Francia) tres documentos cuyo valor no puede calcularse, que nos han sido confiados a efecto de investigación histórica por Madame James residente en la localidad francesa de Montazels (Aude). Pasaron legalmente a manos de dicha señora en virtud de una herencia de su tío el abate Berenguer Sauniére cura de Rennes le Chateau (Aude)”

     

      AÑO 1956:

      Otro caballero inglés, también amigo personal de Winston Churchill, del que fue ministro de Guerra Económica durante la segunda guerra mundial, hizo una solicitud al cónsul general de Francia en Londres para la retención de tres documentos franceses, a continuación procedía por su honor a especificar los documentos citados. Eran los mismos que se habían exportado de Francia el año anterior, los describo:

1-      una genealogía fechada en 1244 que lleva el sello de Blanca de Castilla (reina en ese entonces de Francia y madre del futuro rey San Luis), y que confirma la supervivencia de la estirpe merovingia.

2-      Una genealogía que abarca el período 1244-1644, lleva fecha de este último año y es obra de Francois Pierre de Hautpoul, señor de Rennes le Chateau.

3-     Un testamento de Henri de Hautpoul de 1695, cuyo contenido, según dijo un jurista de dicha época: contenía un secreto de estado que nunca se había revelado.

      Los documentos se guardaron entonces en un banco de Londres.

      A esto hay que añadir que en estos años 1956 y 1957, algunos de los caballeros que hemos citado, junto con otros hasta llegar a un número de veinte hicieron formalmente una exigencia de reconocimiento de los derechos de los merovingios.
Y siguiendo con el relato:

Torre Magdala bajo cuyos cimientos está enterrado un cofre con copias de las genealogías secretas

      
      Así pues, Berenguer, antes de entregar los documentos a los Habsburgo, tuvo la prudencia de hacer unos duplicados, para legarlos a su sobrina Madame James para que algún día fueran dados a conocer. Pero no contento con esto no los copio una vez sino dos veces. Y estos segundos duplicados quiso que pasaran al pueblo llano de una forma muy curiosa. Mientras estaban haciéndose los cimientos para su Torre Magdala (su biblioteca particular) aprovechó un descanso de los obreros en que éstos se habían ido a comer y en que casualmente quedaba un obrero sólo, el elegido, aprovechó, digo, para arrojar un gran cofre en la zanja donde estaba el cemento todavía sin fraguar y que lo engulló en su seno, mientras con voz hipnotizadora le decía al joven obrero que “contaba con él para que un día el contenido de ese cofre fuera dado a conocer al mundo”. El obrero se quedó estupefacto y no entendió nada, pero el mensaje quedó grabado en su retina, hasta el punto de que se lo transmitió a su hijo. Ahora bien he aquí a este hijo instalado en Nueva York, porque él y su padre eran de ahí o porque él se fue a vivir allí siendo de otra parte, no lo sé ni importa, lo que importa es que con el éxito y la fama del tema Berenguer Sauniére y del Priorato de Sión, antes y después del Código da Vinci, este hijo siguió recordando lo que le había dicho su padre sobre el cofre enterrado, lo relacionó y puso tanto ahínco en que se encontrara el cofre que logró interesar a una compañía neoyorkina de sondeos con georadar de penetración en tierra y a otras personas, negociantes del mundo editorial por supuesto, de tal forma que unos expertos consiguieron los permisos necesarios para efectuar sondeos bajo la Torre Magdala, comprometiéndose a excavar, si se llegaba el caso, con muchísimo cuidado de no deteriorar para nada ni la torre ni el entorno. Pero he aquí que cuando tuvieron el primer éxito identificando un objeto en los cimientos se produjo el atentado de las torres gemelas del 11-S de 2001 en Nueva York, y resulta que esta empresa que hacía el sondeo y las excavaciones tenía su sede en plenas torres gemelas, y el golpe que recibieron fue tan demoledor que se paralizó totalmente el geosondeo, y aunque dos o tres años después se realizó la excavación para constatar que el objeto detectado era una piedra, ya no hubo mas avances ni se reanudó la búsqueda. Norteamérica todavía no ha superado el golpe y estamos ya en el 2009 (al escribir esto por 1ª vez) (y dándole un repaso en 2012) Pero algún día lo superara y la búsqueda del cofre con las genealogías y el testamento se reanudará y se culminará.

                                                                                                                                          
Pero ¿Qué nos dirán los documentos una vez encontrados y publicados? Respuesta: básicamente lo que ya sabemos, que la Magdalena tuvo un hijo de un descendiente del rey David de Judá y que luego su descendencia reinó como dinastía merovingia en Francia, luego dirán que esa descendencia se perpetúa hasta los Hautpoul y luego hasta 1781 con los Negre de Arles de Hautpoul de Blanchefort, siempre sin salir del entorno de Rennes le Chateau (capital del Razés). Pero a nosotros lo que nos interesa es saber ¿quién es el descendiente justo en el siglo XXI cuando se publiquen los documentos y lleguen a nuestro conocimiento en el futuro? Lo que sé es que a Maria de Negre le sucedió como señora de Rennes otra fémina que vivió los tiempos de la revolución francesa y que se vio obligada a vender el castillo de los Hautpoul después de que la Francia revolucionaria suprimieran su título de nobleza, y que mas adelante algún descendiente llegó a tener que vivir hasta de la caridad, a éste es al que tenía que haber ennoblecido Berenguer Sauniére con el tesoro, pero no lo hizo, y así hoy en día la descendencia sagrada probablemente subsista con apellidos humildes y perteneciendo a una clase vulgar o media. Pero ¿y si aún así y todo damos con él? Pues hombre, yo le ofrecería mi voto para que ocupase una posición superior a la que esté ocupando en ese momento, y luego le diría que tiene ciertos derechos sobre el tesoro que el descendiente del archiduque Oto de Habsburgo (heredero del emperador Carlos, a su vez heredero del emperador Francisco José) probablemente tenga guardado en la cámara acorazada de algún banco, pero eso sí, sin dejar de recordarle que de esos derechos tiene que saldar una deuda con la Galicia hispano portuguesa que va de la orilla noroeste del Duero a la orilla noroeste del mar Cantábrico. Entonces sabré que Dios está contento conmigo.

Pero hasta que eso pase primero hay que solucionar los efectos de la catástrofe del 11S-2001 y para solucionarlos primero hay que saber quién tramó el atentado del 11S y lo incubó y lo dirigió orquestalmente, todo lo cual hizo el ex-secretario de la ONU Kurt Waldheim, cuya biografía y fecho rías pasamos a narrar a continuación.
11-S de 2001: EL CRIMEN DEL TURBIO KURT WALDHEIM (2)

                                                pofiquituromor

  El 20 de abril de 1945, justamente el día del cumpleaños del Fuhrer, Kurt fue condecorado con la medalla del mérito de guerra de primera clase con espadas por sus servicios bajo el mando del general Loehr.

      Días después le fueron concedidos unos días de permiso para ir al bunker de la cancillería de Berlín a recibir las felicitaciones del propio Hitler, que había escudriñado su carrera y había concluido que era una joven promesa digna de alabanza. Kurt tenia 26 años, Hitler 56.

       El día 30 de abril de 1945, último día de la vida del Fuhrer, Kurt se encontraba en el bunker con Hitler, éste le estrecho fuertemente la mano y le cogió por los hombros diciéndole que, de haber tenido un hijo, le hubiera gustado que fuese como Kurt, una persona fiel a la causa hasta el final, luego le dijo que podía quedarse todo el tiempo que quisiera visitando el búnker y que si alguien le decía algo, le contestara que él en persona le había dado permiso. Y así fue. Kurt se quedo fisgando por toda la instalación y se dio cuenta que muchas mesas empezaban a estar vacías, debido a que sus ocupantes desertaban debido a que era el tiempo de los últimos estertores del imperio nazi. Entonces le vino una idea descabellada a la cabeza: ¿Y si me quedo aquí escondido hasta el final, hasta ver que es lo que ocurre con Hitler en el último momento?, dicho y hecho, encontró un lugar propicio para observar y, oculto detrás de una columna, dejó pasar el tiempo observando cómo mesa tras mesa todo el búnker se iba vaciando, hasta que el propio Fuhrer se dio cuenta y, visto que era llegado el momento del fin, decidió pasar al otro barrio en compañía de Eva Braun, ésta se bebió la copa con cianuro, tras lo cual Hitler se disparó en el paladar superior introduciéndose el revólver en la boca abierta. A continuación sus últimos fieles extendieron una manta en el suelo y depositaron en ella los dos cuerpos, luego los envolvieron y salieron a la entrada del búnker, allí, en uno de los cráteres abiertos por las bombas americanas lanzadas desde los aviones, depositaron el bulto y lo rociaron con gasolina, tras de lo cual lo hicieron arder, y sólo quedó en el ambiente un extraño olor a almendras amargas. Entonces les llegó el turno a los últimos fieles de desaparecer. Y el último fiel en desaparecer fue Kurt. Excitado por su propia temeridad de haber sido él quien actuara como verdadero capitán del barco que se hunde, no le quedó más remedio que salir de su escondite y huir hacia delante, como un loco poseído por la idea de que, según el protocolo, a él le correspondía todo el honor, de él era el auténtico mérito de haber resistido hasta el final, más aún que el propio Fuhrer, y así, mientras salía y se alejaba en dirección de regreso a su cuartel general en los Balcanes, se hacía el firme propósito de dedicar todo el resto de su vida a valorar el protocolo en grado sumo, como máxima expresión de su política.

      El 8 de mayo de 1945 se produce la capitulación alemana de la guerra.

      En  mayo de 1945 una delegación de partisanos yugoslavos se presenta en el cuartel general de Loehr cerca de Zagreb, en Sevnica, con el propósito de iniciar las conversaciones  para la capitulación de las tropas alemanas. Un testigo cuenta que Kurt se encontraba con Loehr en esa fecha. Así Kurt fue prisionero de los partisanos yugoslavos por un breve lapso antes de huir.

      El 15 de mayo de 1945, según testigos, Kurt se encontraba en el pueblo austriaco de Stervja en la región de Ramsau, donde su mujer acababa de dar a luz a una niña.

      Desde fines de mayo se interna a Kurt en el campo norteamericano de Bad Tolz en la Alta Baviera,

      A principios de agosto de 1945, se le autoriza a volver a Viena y a actuar como si nada hubiera pasado, totalmente en libertad.

      El 30 de agosto de 1945 Kurt se presenta al tribunal superior del distrito de Viena para recibir allí su puesto de “referendar” o funcionario judicial, con lo cual comienza su meteórica carrera..

      El 26 de noviembre de 1945, después de ejercer en el tribunal del distrito de Baden, entra en la oficina de Asuntos Exteriores de la cancillería federal austriaca. Su destino es Baden cerca de Viena, donde residía su padre, zona bajo control soviético, su estancia fue breve.

      En 1947 los yugoslavos libran a Loehr a un tribunal que ordena su ahorcamiento. Loehr el jefw de Kurt fue condenado a muerte y ejecutado en Yugoslavia.

Kurt al fondo de todos, mirando hacia el general Loehr que está inclinado sobre el mapa

     

   

      Desde 1948 hasta 1951 Kurt trabajó como primer secretario de la delegación austriaca en París.

      Luego volvió a Viena hasta que en 1955 Austria fue admitida en las Naciones Unidas (ONU) entonces Kurt fue nombrado observador permanente, director de la misión austriaca y embajador en Canadá. De 1964 a 1968 representante permanente de Austria en la ONU y de 1968 a 1970 Ministro de Asuntos Exteriores de Austria. En abril de 1971 fue uno de los dos candidatos a la presidencia de Austria pero perdió las elecciones. Acto seguido se presentó como candidato a Secretario General de las Naciones Unidas y esta vez lo consiguió:

      El 1 de enero de 1972 fue nombrado Secretario General de la ONU para 5 años.

    

      Comienza su carrera en la cumbre:

      Como secretario generl de la ONU hace de mediador en los conflictos de Sudáfrica y Namibia, de los griegos y turcos en Chipre, de la India y Pakistán, de los países árabes con Israel, donde mientras con una mano rechaza ponerse el gorrito judío, con la otra azuza la guerra del Yom Kippur en el Día sagrado del Perdón. 
      En 1974 Kurt hace que a ONU representando al mundo entero reconozca la OLP Organización para la Liberación de Palestina, la organización terrorissta de Yasser Arafat, como la representante legítima del pueblo palestino. De esta forma tenemos a un Israel legitimado por la ONU en1948 y a una OLP Palestina, que no reconoce el derecho a la existencia de Israel, legitimada también por la ONU en 1974, con 26 años de diferencia. Tienen ambos por tanto el mismo derecho a la existencia, algo más antiguo el de Israel, y el conflicto está servido. Es un conflicto creado por la misma ONU. Ambas partes lucharán encarnizadamente entre sí por culpa de la ONU presidida por Kurt, al que ahora si se le puede llamar Emperador del Mal.

      En 1976 Kurt fue reelegido para su mandato en la ONU hasta diciembre de 1981. Luego desaparece de la historia, gracias al veto chino, para volver a reaparecer en 1986, en que vuelve a ser candidato para la presidencia de Austria, su país. Entonces ocurre lo inesperado, durante su campaña se descubre su pasado comprometido pro-nazi y empiezan a descalificarle en todos los periódicos del mundo. Austria cierra filas en torno a él y es elegido presidente de la nación para el mandato 1986-1992, pero aparte de Austria el mundo le cierra sus puertas. Sobre todo, Estados Unidos le declara “persona non grata” y le prohíbe la entrada a dicho país, esta es la gota que colma el vaso.- “Cerrarme las puertas a mi -piensa él- a mí que he sido presidente de la comisión sobre la utilización del espacio ultraterrestre con fines pacíficos, a mi que he sido presidente del comité de salvaguardia del organismo internacional de la energía atómica, a mí que he presidido conferencias sobre el comercio y desarrollo, sobre el medio ambiente, sobre el Mar, sobre la población, sobre la alimentación mundial, sobre la seguridad Europea y la cooperación. Eso a mi no se me hace. Sin mí el mundo no habría llegado a ser lo que es. A mí el mundo me lo debe todo. Ya van a ver los americanos, y el mundo en general, de lo que soy capaz. Les daré su merecido”.- Y así llega el año de 1992 en que termina su presidencia sin haberse podido mover apenas por el planeta, excepto algunas pocas visitas a sus amigos presidentes de los países árabes, y sin posibilidades ya de ser reelegido presidente de su nación, pues carecía  totalmente de popularidad y prestigio en Occidente. 1992 es el año en que desaparece de la escena para siempre, hasta que le llega su muerte en el anonimato, en Viena, el 14 de junio de 2007, por una fiebre infecciosa cardiaca, es decir, por tener el corazón infectado. Pero el mal ya estaba hecho: el atentado a las torres gemelas de Nueva York world trade center el 11-S de 2001

      .Entre 1992 el año en que desapareció de la escena, y 2007 el año en que murió, Kurt tuvo una gran participación en un acontecimiento mundial de primera importancia: el atentado terrorista suicida contra las torres gemelas de Nueva York el 11 de septiembre de 2001

       La cosa fue así: Kurt fue obligado a abandonar la presidencia austriaca para siempre en 1992. Poco después, el 26 de febrero de 1993 la organización terrorista Al Qaeda dejaba una furgoneta cargada con explosivos en un subterráneo del World Trade Center de Nueva York (Torres Gemelas) que al explotar dejó un balance de 6 muertos y un millar de heridos, lo cual le hizo ver a Kurt que no estaba sólo en el mundo, que había otros que como él estaban resentidos contra los Estados Unidos y dispuestos a golpear cruelmente. Así pues echó mano de sus contactos de los países árabes, de cuyos presidentes se había hecho amigo durante su mandato en la ONU, e hizo preguntas: -“¿Quién se esconde tras la organización Al Qaeda? ¿Puedo tener una entrevista secreta con él? Tengo algo muy interesante que proponerle”-. -“Por supuesto que sí, excelentísimo señor Waldheim, nosotros le conocemos muy bien y confiamos en usted”-. Por tanto Kurt y Osama Bin Laden se entrevistaron, y a Kurt le fue fácil engatusar a Osama, le dijo: -“Habéis golpeado bien y en el sitio exacto pero no lo suficientemente fuerte. Yo te puedo asesorar acerca de otro método más letal de proceder, conozco bien el mundo de los vuelos aéreos, como secretario general de la ONU he tenido que ir a recibir al aeropuerto a infinidad de grandes mandatarios a los que he debido de hacerles honores, ha habido días en que he tenido que ir a recibir a tres dirigentes a la vez, en tres lugares distintos, por lo que me conozco todos los horarios aéreos de EE.UU. al dedillo, todas las combinaciones posibles, hasta las más complejas, no hay secretos para mí en cuanto a ese tema, sé más que cualquier piloto sobre cuánto tarda este vuelo, cuanto tarda aquél, cual hace atajo, cual va dando un rodeo, etc. y con todo esto, el plan que te propongo de usar los aviones como proyectiles kamikaze contra las torres gemelas usará los vuelos comerciales mas adecuados al objetivo, serán los más directos y los más cortos, los que mas garantías proporcionen. Sólo hará falta adiestrar a los suicidas en la técnica de pilotar aviones, lo cual se puede hacer fácilmente en algunas academias de vuelo de EE.UU. y luego, BOOM! ¡Tomad eso, yankis, tomad eso otro, gringos de mierda! ¿Qué te parece, Osama?” –“¡Estupendo, honorable señor Waldheim!” Y se pusieron manos a la obra. Como jefe de los suicidas pusieron al egipcio Mohamed Ata, que fue el único que llegó a entrevistarse personalmente con Kurt antes de cumplir con la diabólica misión, Kurt le mandó que destruyera su pasaporte para que nadie llegara a saber que Ata había ido de Alemania a Austria que aún no era de la Comunidad Europea y requería visado en el pasaporte para entrar, que podría servir de pista a la policía. Partieron 4 aviones en misión suicida, uno por cada torre gemela, otro para el Pentágono y otro para la Casa Blanca, éste último fue truncado y no llegó a cumplir con su objetivo, los otros 3 sí que lo lograron. Y el resto de lo que pasó lo sabemos todos:

   

     Como reacción al atentado EE.UU. le hizo la guerra a Afganistán en el mismo 2001, e impulsado por el éxito se lanzó ha hacérsela también a Irak en 2003, tras de lo cual, en el colmo del atrevimiento, le toca el turno a Irán, pero entonces van los países árabes y hacen una barrera protectora en torno a Irán, con una manifestación de fuerza: suben el precio del petróleo de treinta y pico dólares el barril a casi ciento cincuenta dólares en lo que va del año 2008 al 2009, se transmite la crisis al cemento y a las hipotecas en Occidente y llegamos a la crisis mundial actual, comenzada en 2008. Los árabes han mostrado de lo que son capaces si se produce la guerra contra Irán ¿Se atreverán los USA a hacerla? Eso parece

      Lo que si podemos dar por cierto es que las profecías de Angelo Roncalli se cumplen: En el libro de Pier Carpi página 123 línea 8 podemos leer:

  

      Mas, atención al último que salió de la madriguera. Será difícil acabar con él y prepara nuevos infortunios para el mundo. El conoce el verdadero rostro de la Bestia.

     

      La madriguera es el búnker de la cancillería en Berlín, donde se refugió Hitler con los suyos en la última etapa de la guerra. Y el último en salir del búnker fue Kurt Waldheim, que tanto mal le ha causado al mundo con su presidencia de la ONU y con el atentado del 11-S.

      En la página 144 línea 5 podemos leer:

      Y en el palacio donde se abrazan los estados vive el fugitivo de la madriguera. De este palacio brota el odio hacia Israel. Será señal de ruina.

      Esto es, en el palacio de las Naciones Unidas tuvo su razón de ser, palpitó, el corazón de Kurt Waldheim, ya que lo que hizo no fue mandar, pues se limitó a presidir cumbres y conferencias y a moderar, pero sobre todo ejerce el protocolo, tan sagrado para él. Y habitó en la ONU desde diciembre de 1971 hasta diciembre de 1981, período en el que incubó y sembró el odio anti-judío, tan típico de los nazis, en todos los países del mundo. Él concitó la guerra del Yom Kippur y, en vista de su fracaso, a continuación legitimó a Yasser Arafat, un terrorista que no creía en el derecho a existir de Israel, como representante de la nación palestina con derecho a tierra santa.

      Y en la página 148 línea 10 podemos leer:

      El tiempo ha incubado una mente turbia…..Ha tramado un crimen alrededor de si misma. Hay quien renuncia a la vida por amor del mal.

      Tras ser el punto de mira en el ojo del huracán por su pasado nazi, tanto fingimiento, de querer demostrar ser lo que no se es, de tratar de borrar el pasado nazi, de mentir y más mentir y no arrepentirse, para hacer creer que se tiene un pasado limpio cuando lo que se tiene es un pasado oscuro, esta doble vida mental (se dice una cosa pero se piensa siempre lo contrario) ha llegado a enturbiar la mente de Kurt y convertirlo en el maquinador de un macro-crimen contra la mano que lo ha alimentado, contra ese lugar al que se lo debe todo, Nueva York y los Estados Unidos, en despecho solamente por haberle descubierto su pasado y haberle arruinado su carrera política. Y para dar una respuesta criminal se ha valido de terroristas musulmanes suicidas, que renuncian a la vida por amor del mal.